Motor fuerte pero de cuidados

El motor es el corazón de todo automóvil y para un camión este es eso y hasta un poco más. Para mantenerlo en óptimas condiciones siempre es necesaria una revisión de rutina, además también es recomendable chequearlo al encenderlo y al apagarlo.

Luego de encenderlo:

  • Debe asegurarse de que las manecillas que tiene el tablero se muevan de derecha a izquierda. Así indica la computadora que hace la revisión para encontrar posibles códigos de fallas.
  • Esté atento a que el medidor muestre la presión del aceite, al menos unos 20 minutos antes de que haya encendido el motor.
  • Si la presión del aceite muestra un nivel que no es normal, no aumente la velocidad.
  • El motor no debe estar en ralentí más de 10 minutos.
  • Para que se lubriquen bien los cojinetes al arrancar en frío, aumente gradualmente las revoluciones.

Cuando apague el motor:

  • Antes de apagarlo ponga el motor en ralentí de 3 a 5 minutos para que el refrigerante y el aceite se lleven el calor que se acumula en las masas de hierro.
  • Si su motor ya tiene sus años, será más necesario mantener el ralentí. Ajuste estos períodos según el tamaño de la máquina.

 

Para poner en ralentí el motor debe llevar a neutro la transmisión, poner el freno de mano, apagar todos los accesorios y faros delanteros. Por último, déjelo en ralentí unos 5 minutos para que se enfríe el turbo y listo.

Los motores diésel tienen más fortaleza y durabilidad, más con los adelantos tecnológicos estos ahora son mucho más eficientes,  limpios y menos ruidosos. Sin embargo, si no se les hace el debido mantenimiento rigurosamente, tales avances los hacen más propensos a tener averías.

Los camiones deben su vida útil no solo a su fortaleza, también a los cuidados que se les den, y teniendo en cuenta el tipo de trabajo que estos realizan se les debe dar mucha atención. Si debe reparar averías y busca rendir su presupuesto, consulte en los desguaces camion y tendrá a su disposición un conjunto de establecimientos que ofertan piezas usadas pero garantizadas.

Este tipo de negocios, resulta una alternativa favorable en especial para quienes poseen una flota de camiones antiguos, en virtud de que tienen piezas para todos los modelos independientemente del año de los mismos. Mientras que en los distribuidores de repuestos nuevos, muy probablemente, no encontrarán lo que ameritan.